¿Sabes qué es un estilo de aprendizaje kinestésico VAK o cenestésico ? Quizás necesites antes realizar el ejercicio que propuse en una entrada anterior de este blog para descubrir primero cual es tu estilo de aprendizaje.
Aprende aquí, que se siente al conocer los secretos de este estilo de aprendizaje.
El estilo de aprendizaje kinestésico VAK, es uno de los más desconocidos, y seguramente el peor tratado en el sistema escolar actual.
Un adolescente kinestésico, necesita moverse, tocar, experimentar para aprender, pero… ¿en cuantas clases se permite a los adolescentes moverse libremente mientras explica el profesor?
¿Cómo detecto si tiene un estilo de aprendizaje kinestésico VAK ?
Fijándonos en detalles del comportamiento de un adolescente, podemos encontrar pistas que nos orienten sobre si es su estilo de aprendizaje kinestésico VAK.
- Forma de hablar. Las palabras y expresiones utilizadas tienen que ver con las sensaciones y sentimientos, incluso con el movimiento. Habla de forma pausada.
- «Tuve una extraña sensación cuando ví aquel objeto»
- «Me quedé helada cuando me lo contaste«
- «Cuanto tiempo sin verte ¿Cómo andas?»
- «Me he quedado sordo cuando te has marchado…«
- «Ese color me provoca escalofríos…«, etc.
- Forma de mirar. No necesitará mucho contacto visual contigo, pero quizás trate de mantener contacto físico para explicarte algo. Mirará hacia abajo y a la derecha durante la misma.
- Otros comportamientos: Son muy expresivos, realizando movimientos y gestos con las manos. Responden mejor a un tipo de conversación pausada y tranquila, con voz grave. Necesita moverse para estudiar, no puede estarse quieto sentado durante mucho tiempo.
¿Cómo aprende mejor alguien con el estilo de aprendizaje kinestésico VAK?
El adolescente con un estilo de aprendizaje kinestésico VAK, captará información a través de las sensaciones su cuerpo y sus movimientos.
- Aprende al interactuar físicamente con las cosas. Necesita tocar, sentir y moverse.
- Tiene que asociar los contenidos con movimientos o sensaciones corporales. Si necesita aprender la palabra martillo, la recordará mejor si realiza el mismo movimiento que si tuviese un martillo en la mano y estuviese clavando un clavo.
- Su aprendizaje es más lento. Se adapta mejor a tareas con tiempo limitado y descansos frecuentes.
- Necesita físicamente practicar con acciones. Las actividades físicas, el dibujo, pintura, los experimentos de laboratorio, los juegos de rol, etc. mejoran su aprendizaje.
- Recuerda mucho mejor lo que hace que lo que ve o escucha. Cuando el profesor explica, y no puede moverse de su sitio, se siente frustrado porque le cuesta recordar la información más tarde.
- Tiene la peor forma de almacenar la información académica, que habitualmente se presenta mediante texto e imágenes. Sin embargo, tiene mucha mejor capacidad para retener la información si tiene que ver con lo artístico o deportivo.
El adolescente kinestésico estará inquieto en el aula, tanto en desde le punto de vista mental como físico.
Necesita moverse para aprender, y en la escuela esto no está permitido en muchas materias.
Si le vemos dar paseos mientras trata de estudiar, dejémos que continúe en movimiento. Le resultará más fácil el aprendizaje.
¿Qué problemas se encuentra el adolescente kinestésico?
Entre un 30% y un 50% de los adolescentes prefiere un estilo de aprendizaje kinestésico VAK. Aumenta ligeramente este porcentaje si es del sexo masculino.
A pesar de ser un grupo muy numeroso, no se les presta mucha atención en las aulas. De hecho, uno de los motivos principales de castigo es «no estarse quieto». Al adolescente kinestésico le dan ganas de gritar «Si no puedo estarme quieto«.
En la infancia, los profesores enseñaban mediante métodos más kinestésicos. Se les permite a los niños moverse, tocar y experimentar. Pero al llegar a la adolescencia, cambia el modo en que se transmiten los conocimientos, y llegan los problemas.
Necesitará traducir la información que recibe en acciones para poderla recordar. Solo aprenderá matemáticas haciendo problemas, e historia… «haciendo un pequeño teatro». Más tarde veremos algunas estrategias.
Números que se mueven…
Isabel era una niña que provocaba bastantes problemas en el colegio. Sus padres estaban preocupados por su rendimiento, sobre todo en matemáticas. No conseguían que aprendiese algunos conceptos básicos como las fracciones.
Habían probado con varios profesores particulares, pero no conseguían que mejorase sus resultados.
Cuando me entrevisté con Isabel, me dí cuenta que tenía un estilo de aprendizaje kinestésico. No podía estarse quieta, los libros la aburrían y solo se entretenía haciendo algún tipo de trabajo manual.
Apliqué un sencillo truco que consistía en explicar el funcionamiento de las fracciones utilizando números, signos y barras de madera de un antiguo juego que tenía en mi casa, de cuando mis hijas eran más pequeñas.
La enseñé a realizar operaciones básicas con fracciones (suma, resta, multiplicación y división) desplazando los números por la mesa, de un lado a otro.
Cuando finalicé la explicación le puse varios ejercicios que resolvió con rapidez. Al finalizar comentó «Qué fácil es esto…»
Lo realmente interesante del método anterior es que cambié una representación gráfica, que es un número escrito, por algo que podía mover y tocar físicamente. Ahí es donde entró en juego su estilo de aprendizaje kinestésico VAK.
Es conocido que mantener una buena atención en el aula, supone más de un 70% del trabajo que necesita un adolescente para superar una materia.
El adolescente kinestésico, que no puede moverse durante la clase, pierde fácilmente la concentración. Le cuesta mucho seguir una explicación oral del profesor sin ni siquiera tomar apuntes, realizar esquemas o dibujos. No puede quedarse pasivo escuchando o viendo algo.
¿Puedo mejorar su aprendizaje?
Hay que facilitar al adolescente kinestésico experiencias que le hagan sentir, en las que pueda tocar y moverse.
- Realizar dibujos relacionados. Si está leyendo un texto, o escuchando una explicación del profesor, puede realizar dibujos que le faciliten recordar posteriormente la información.
- Utilizar objetos que pueda mover. Podría realizar una representación, mediante objetos, de los contenidos que debe aprender. Por ejemplo, unas fichas que se mueven por un mapa, pueden ayudar a comprender las guerras o invasiones de unos países a otros. También puede asociar una palabra a un objeto o lugar de la habitación, y desplazarse andando hasta este para recordar mejor esa palabra.
- Realizar simulaciones o Role-play. Realizar un pequeño teatro simulando la información que deba aprenderse. Si tiene que recordar la coronación de un rey, puede sentarse en su silla, como si fuese el trono real, y simular lo que dirían los personajes que intervienen en la ceremonia.
- Escribir sobre las sensaciones de un objeto. Cuando necesite aprender información, por ejemplo de una pintura de un artista, puede escribir sobre las sensaciones que le transmite esta mientras la contempla.
- Representar imágenes, objetos, sonido y palabras a través de posturas o gestos. Mucho más fácil es «poner una cara triste» que recordar la palabra triste para un kinestésico. Podría recordar el nombre de un ave si simula el movimiento de esta la volar, al moverse, etc. Por ejemplo, puede recordar el ave Flamenco, apoyándose en una sola de sus piernas, mientras encoje la otra.
El adolescente kinestésico necesita «hacer». Los programas informáticos, o páginas web interactivas como «nuestro cuerpo en un click» o Toporopa, son unos buenos ejemplos.
¿Se lo comento al profesor… tengo aprendizaje kinestésico?
Es bastante interesante que su profesor conozca que tiene un estilo de aprendizaje kinestésico VAK. La primera ventaja es que entenderá las razones de porqué no puede estarse quieto en el aula. También favorecerá que el profesor busque otros medios o recursos para explicar los mismos conceptos, que ayuden a los adolescentes kinestésicos.
Conozco algún profesor que explica historia, que realiza auténticos teatros dentro de su clase para explicar cualquier hecho. Los adolescentes además de aprender, se divierten, creando interés por esta materia.
Con el estilo de aprendizaje kinestésico VAK, finalizamos la serie de entradas de blog dedicadas los diferentes estilo de aprendizaje.
Si no has tenido oportunidad de leer las entradas anteriores sobre el aprendizaje visual o el auditivo te recomiendo que lo hagas. Pero sobre todo, realizar el ejercicio inicial que propuse en una entrada anterior para detectar el estilo de aprendizaje.
En próximas entrada comentaré algunos aspectos sobre la organización del estudio del adolescente. Una buena gestión del tiempo traerá beneficios tanto para al adolescente como para sus padres.
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hola tengo a mi hija de 14 años y observo que es le cuesta recordar lo que se le explica, luego se le olvida , es inquieta esta pendiente de todo lo que esta pasando en su entorno, creo que es kimestesica , aunque en la parte motivacional no tiene metas ni entusiasmo , en si mismada , estoy preocupado , se que sta en la etapa de adolecente ….. me guistaria que me de su apoyo