By
Patxi Martín
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Agresiones verbales
Sobrevivir a un verano en familia, sin que afecte a tu autoestima, o sin enfadarte, puede parecer una tarea imposible.
Las vacaciones de verano pueden ser una experiencia maravillosa o una tortura. Sobre todo si tienes que pasarla con tu familia. Y no me refiero a tu círculo cercano (padres e hijos), sino a los “agregados».
Los agregados es aquella parte de tu familia que no es directa, o sea, cuñados, suegros, etc., especialmente cuando son de la rama familiar de tu pareja. Por que claro, cuando son de tu parte, «son menos agregados…»
Y es que, como escuché una vez, “los amigos son ese regalo que te ha enviado Dios para compensarte por la familia». Sí, a los amigos los eliges tú, a la familia no.
Los amigos son ese regalo que te ha enviado Dios para compensarte por la familia.
Cuando te cansas de una amistad, simplemente dejas de verla. Así de sencillo. A la familia, cuando menos te lo esperas, te la vuelves a encontrar: comida familiar que ha planeado alguien, el cumpleaños de la abuela que cumple 90 años, una comunión, o incluso unas vacaciones “familiares»
Así que, si no tenías suficiente con juntarte un solo día, ahora lo tienes que hacer 1 semana o 15 días con suerte.
¿Pero puedes sobrevivir a unas vacaciones familiares sin enfadarte?
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